Hoy ha llegado a mis oídos una noticia local que parece ser que lleva algunos días dando vueltas por este nuestro "pueblo". El tema es que a un niño de escasa edad se le ha diagnosticado un tumor cerebral del cual lo han operado con resultado incierto. La noticia, ciertamente triste, no tendría desgraciadamente más importancia en nuestro mundo real, si no fuera porque, inicialmente un profesional médico habría tenido una negligencia médica al no diagnosticar correctamente esta enfermedad o, al menos, pedir ciertas pruebas a partir de los síntomas manifestados por el paciente. No voy a entrar a acusar o a defender a ninguna parte porque no dispongo de todos los datos objetivos y temo que la información original haya sido deformada definitivamente por la rumorología rural, pero si le doy veracidad a la esencia de la noticia (el diagnóstico fallido de una enfermedad muy grave en un niño pequeño), se me ocurren una serie de preguntas de complicada contestación, al menos para mi:
-¿un profesional de la medicina se puede equivocar tanto como cualquier otro profesional de cualquier otra materia? (creo que se equivocan menos veces que yo, o, a lo mejor, es que no tenemos tantas enfermedades mortales como creemos y sus errores no los detectamos);
-¿un médico ha de estar únicamente dedicado a su profesión sin posibilidad de ninguna distracción, trabajo o afición complementaria? (se me ocurre que conozco bastantes médicos con consulta privada a la cual dedican, al menos, las mismas ganas e interés que a su faceta publica);
-¿el diagnóstico precoz de esa enfermedad hubiera podido suponer una mayor posibilidad de curación en el paciente, o por el contrario, estaba condenado desde el principio?;
-¿tendrá algo de culpa el sistema sanitario actual descentralizado en el cual abundan los medios materiales (con el tiempo obsoletos) y escasean las personas profesionales?;
-¿tendrá importancia el número de consultas de los profesionales médicos para no atender correctamente a los pacientes más importantes desde el punto de vista de la medicina?;
-si en cualquier trabajo existe un control del trabajo realizado, ¿esto también existe en el ámbito de la medicina, o sólo a posteriori, cuando se ha producido una supuesta negligencia?;
-¿están adecuadamente motivados los cuadros médicos (ya sea económica o personalmente)?.
3 comentarios:
Un médico es una persona? Definitivamente sí, por lo tanto se puede equivocar de la misma forma que lo hace cualquiera en su trabajo. La diferencia está en que si tú te equivocas con un porte o mi hermano hace mal una transferencia, el mal es menor. No lo solemos llamar "negligencia". Un error médico que se lleva por delante una vida por un mal diagnóstico o una dejadez, sí es un mal mayor, en mayúsculas y con todas las letras.
Pero como todo en la vida, tiene sus matices. Soy condescendiente con un error humano, de cálculo o de lo que quieras, pero no con la dejadez y la mala praxis de muchos médicos que estudian la carrera porque así lo dice su "estirpe". Vocación no significa perfección en tu trabajo, pero ayuda a que todas esas cosas no pasen.
Mi padre se murió y nadie nos supo decir por qué. Al neumólogo que lo atendió le daba igual, por supuesto. Así que me sensibiliza bastante este tema. Hay médicos y dioses con bata blanca. Y los segundos sobran.
Perdón por el rollo.
De acuerdo, pero ¿cómo se soluciona eso?; ¿pagando más, controlando más, obligando a tener dedicación absoluta o castigando ejemplarmente a los negligentes?. Estas decisiones u otras cualesquiera tienen un importante coste económico o social (o ambos).
Pienso que no hay solución. Sólo que cuando te pase algo, a tí o a alguien de tu familia, tengas la suerte de dar con el profesional adecuado. Que tengas suerte de que te ofrezcan una atención individualizada y que no vengas en la lista ese día, claro, porque si ese día te toca, ya puede atenderte el mismísimo House con su bastón...
Siento no tener respuestas a tus preguntas y de aportar tan poco a este tema tan "jugoso".
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